Los últimos datos del coronavirus en España revelan una tendencia a la baja en los contagios. Así, en la primera semana del año se han notificado 9.220 nuevos casos de COVID-19, frente a 14.221 el mismo día de la semana pasada. La incidencia en mayores de 60 años se sitúa en 129,40 en los últimos 14 días por 100.000, frente a 141,47 el pasado viernes.
El auge de contagios en China ha generado preocupación en el resto del mundo. El director de Emergencias Sanitarias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Michael Ryan, ha mostrado sus dudas acerca de la veracidad de las cifras de contagios y muertes de COVID-19 que está notificando China.
"Creemos que las cifras que se publican actualmente en China no reflejan el verdadero impacto de la enfermedad en términos de ingresos hospitalarios, en términos de ingresos en la unidad de cuidados intensivos (UCI) y, sobre todo, en términos de muertes", ha señalado.
El aumento de casos de coronavirus se ha vuelto a disparar en el gigante asiático después de la aparición de la variante B.F.7 en China que está colapsando los hospitales. Por ello, el Ministerio de Sanidad insiste en la importancia de la vacunación. La ministra Carolina Darias, aseguró la semana pasada que el 55% de personas mayores de 60 años han recibido la cuarta dosis. Ante esta amenaza proveniente de China, se ha acelerado el ritmo de vacunación en esa franja de edad.
¿Qué vacuna se administra en la cuarta dosis?
La cuarta dosis frente al covid-19 está adaptada a las nuevas variantes y se administra a mayores de 60 años, personas de riesgo y profesionales relacionados con la Sanidad.
Se administra las vacunas bivalentes, es decir, se administrarán los sueros adaptados de las versiones originales de Cominarty (Pfizer/BioTech) y Spikvax (Moderna) que protegen frente a las subvariantes de ómicron pero también de las formas iniciales del SARS-Cov-2.
Sanidad insiste en que estas vacunas son más precisas y ofrecen una protección más amplia y los efectos secundarios son similares a las ya administradas.