Además desde la organización aconsejan acudir directamente a la policía en caso de una presunta estafa y también si durante la fiesta se sospecha que el aforo se ha sobrepasado.
Si el evento se cancela o suspende, hay que exigir el dinero invertido y es muy recomendable guardar los documentos y datos de la empresa hasta después del evento. Facua añade a todo esto la responsabilidad de ayuntamientos y comunidades para hacer los controles necesarios ante los miles de cotillones que se esperan esta noche.