se comprueba su estado cada dos horas

Refuerzan la vigilancia sobre Rosario Porto tras un amago de suicidio

La dirección de la prisión de A Lama (Pontevedra) ha endurecido las medidas de control sobre Rosario Porto, quien cumple una condena de 18 años de cárcel por la muerte de su hija adoptiva Asunta Basterra, después de que la reclusa protagonizase un amago de suicidio el pasado día 12 de este mes.

ondacero.es

Madrid |

Rosario Porto | EFE

Distintas fuentes penitenciarias consultadas por Europa Press han confirmado que el incidente tuvo lugar la pasada semana en el momento de la ducha. Fue entonces cuando Rosario Porto empezó a llamar a la interna que tiene asignada en el marco del protocolo de prevención de suicidios, que la halló con el cordón de la sudadera de un chándal al cuello.

Aunque el acto pudo afectar a su integridad física, las fuentes consultadas por Europa Press apuntan que la forma en la que se desarrollaron los hechos da a entender que la interna, que se encuentra "deprimida", actuó como "una forma de llamar la atención".

Porto fue trasladada a la enfermaría sin sufrir lesiones graves y la dirección de la cárcel ha elevado las medidas del protocolo de prevención de suicidios que nunca se le llegó a retirar, ya que no es la primera vez que protagoniza un incidente similar.

Así, fuentes del centro penitenciario han ratificado que ahora está con más de una interna de confianza; y que su vigilancia por parte de los funcionarios también se ha reforzado, ya que se comprueba su estado cada dos horas. Fuentes de Instituciones Penitenciarias, por su parte, se han limitado a ratificar que "se han reforzado las medidas" del protocolo de prevención de suicidios.