Los regantes pedirán el viernes al Gobierno "más trasvases viables" en la ronda de reuniones por el Pacto Nacional del Agua

El presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (FENACORE), Andrés del Campo, ha explicado que pedirán "más trasvases" que sean "viables desde el punto de vista ambiental y económico" en la reunión que mantendrán este viernes 8 de septiembre con la directora general del Agua, Liana Ardiles, en el marco del Pacto Nacional del Agua.

Ante el contexto de sequía que padece España, con los embalses españoles al 42,9 por ciento de su capacidad (37,9 por ciento para uso consuntivo); con los niveles de precipitaciones acumuladas en el 12 por ciento por debajo de lo normal; y con las masas de agua subterráneas (un total de 729) afectadas por el "mal estado químico" (255) y el "mal estado cuantitativo" (179), Europa Press entrevista a Del Campo sobre los retos del sector del regadío.

Según Del Campo, en términos generales, pedirán a Ardiles "agua y tecnología"; de manera concreta, que se culminen algunas obras de modernización y "unir algunos trasvases dentro de la misma cuenca", pero "también entre diferentes" demarcaciones, "justificando siempre la viabilidad económica y ambiental".

Para Del Campo, con más trasvases y más embalses se puede "mitigar la amenazada del cambio climático" (que se traduce en "lluvias torrenciales y sequías prolongadas"). Así, considera que "por un lado, se evitarán las inundaciones, porque el agua quedará retenida, y, por otro, los periodos de sequía".

"Es cierto que esto se acaba", --como ha ocurrido con el trasvase del Acueducto Tajo-Segura, ya que los sistemas de cabecera del río están por debajo del mínimo trasvasable--, pero "se pueden hacer más siempre que cumplan con los impactos ambientales, y si no los cumplen, pues no se hacen", ha señalado el presidente de FENACORE.

Sobre cómo está afectando la sequía de España al sector, Del Campo ha asegurado que, "tras el tercer año consecutivo con falta de agua" sobre todo en la cuenca del Duero, que "has sido muy sorprendente", y en la cuenca del Segura--, van a tener que suprimir cultivos de regadío por secano. "Por ejemplo, se va a sustituir maíz por girasoles o trigo", ha dicho.

Según Del Campo, esto va a tener unas "consecuencias económicas enormes", "no solo a los ingresos de los agricultores, sino también al complejo de alimentación asociado". No obstante, considera que aún es pronto para determinar cuántas hectáreas se verán afectadas. "En octubre comenzaremos a planificar todos estos cambios para estar preparados", ha aseverado.

Ante estas consecuencias, Del Campo ha señalado que "como es lógico, la legislación "prioriza el abastecimiento a la población frente a los cultivos", por lo que "quienes realmente se ven afectados son los agricultores", que, además "no podrán amortizar todo la inversión hecha para optimizar los sistemas de regadío" al cambiar de cultivos.

La sequía también está provocando que se usen métodos no convencionales para conseguir agua, como las desaladoras, los bombeos de agua desde los acuíferos o las depuradoras para recuperar agua ya utilizada por la población. "Por ejemplo, con los acuíferos, la idea es sobreexplotarlos en periodos de sequía, y dejarlos descansar en época de lluvias para que se recuperen", según ha dicho Del Campo.