Esta semana no solo llega el frío; las conocidas como enfermedades estacionales - gripe, VRS...- alcanzan su pico de incidencia entre los meses de octubre y marzo, cuando más ciudadanos se ven afectados por estas dolencias, caracterizadas por síntomas como el moqueo o el dolor de cabeza. De este grupo de enfermedades, es el virus respiratorio sinicital - conocido por sus siglas VRS- el que más preocupa en estas fechas a los padres de los niños más pequeños: este virus estacional provoca síntomas similares a los de la gripe o el resfriado, es el principal causante de la bronquiolitis entre los niños menores de 2 años. Otros grupos de riesgo, como las personas mayores de 65 años o aquellas con enfermedades crónicas, pueden verse también especialmente afectadas por esta dolencia.
El VRS origina entre 7.000 y 14.000 hospitalizaciones al año en nuestro país, y se estima que 1 de cada 56 niños sanos es ingresado durante su primer año de vida a causa de la infección de los pulmones en la que puede derivar esta enfermedad. Aunque en la mayoría de casos los pacientes evolucionan favorablemente - y se recuperan en unas dos semanas-, su rápida dispersión puede provocar la saturación de los servicios de asistencia sanitaria: el año 2022, el período de contagios se adelantó hasta el mes de agosto, provocando una cierta situación de descontrol en las UCI pediátricas, tal y como informa el medio Gaceta médica.
El diagnóstico del Instituto de Salud Carlos III
El Instituto de Salud Carlos III, que realiza un seguimiento de la incidencia de este y otros virus, ha publicado un informe con los datos de la semana del 12 de noviembre: el documento advierte que el aumento en la circulación de este virus persiste, que se incrementa sobre todo entre los niños que se encuentran hospitalizados. El Instituto ha informado además de que la incidencia de la gripe se mantiene - con fluctuaciones al alza- y que el impacto del Covid-19 ha disminuido en todos los ámbitos.
¿Existe un tratamiento para el virus?
Este año, la enfermedad del VRS ha recuperado su carácter otoñal, y la comunidad médica cuenta por primera con un importante avance médico: el nirsevimab, un anticuerpo que protege al usuario del virus durante 5 meses, y que contribuye a reducir las hospitalizaciones entre los afectados hasta en un 80%, según indican diversos estudios.
El pasado mes de septiembre, el ministerio de Sanidad instó a las familia para que inmunizasen con este fármaco a los bebés "a la mayor brevedad" posible, y las diferentes Comunidades Autónomas de nuestro país han impulsado campañas para suministrar el fármaco entre los infantes de menor edad; aunque los criterios de cada Comunidad son ligeramente diferentes, el Ministerio de Sanidad recomienda la administración del fármaco entre los niños con riesgo alto de enfermedad grave por VRS, así como entre los niños que no superen los 6 meses durante la temporada de vacunación.
Síntomas del VRS
El VRS presenta algunos síntomas similares a los del resfriado, entre ellos:
- Congestión o goteo en la nariz
- Tos seca
- Estornudos
- Dolor de cabeza y/o garganta
- Fiebre baja
En casos más graves, se pueden experimentar los siguientes síntomas:
- Tos de mayor intensidad
- Fiebre más alta
- Dificultad para respirar
- Sibilancia al respirar
- Color azulado de la piel
Entre los niños lactantes, se puede detectar la presencia de este virus si se descubren los siguientes indicios:
- Respiración corta, superficial y rápida
- Tos
- Dificultad par respirar
- Irritabilidad y cansancio
- Pocas ganas de comer