Son dos nuevos fármacos que suponen un paso más sobre los medicamentos de nueva generación ya que combinan varios principios activos, y eso facilita la dosificación para los pacientes. Esto ha permitido al Ministerio de Sanidad negociar el precio a la baja con las farmaceúticas.
El departamento que dirige Alfonso Alonso pactó un techo de gasto de 727 millones de euros con las farmaceúticas para tratar, al menos, a 52.000 pacientes infectados con el virus con algún grado de fibrosis en el hígado.
En el acuerdo se incluyen otras cláusulas como la reducción de precio por número de pacientes o que el laboratorio pague un segundo tratamiento si el primero no es efectivo.