La FAFO es una dieta flexible y sencilla para controlar el sobrepeso, basta con fijarse en el nombre que esconden sus siglas para darse cuenta de que no propone resultados milagrosos, 'Flexible and Friendly for the Overweight', flexible y respetuoso con el sobrepeso.
Pese a que últimamente ha adquirido bastante protagonismo, se empezó a hablar de ella el pasado mes de noviembre durante el Congreso Anual de la Sociedad Española de Obesidad que se celebró en Sevilla. En este evento se destacó la FAFO como una herramienta útil para poner límite al sobrepeso.
La obesidad y el sobrepeso son ya considerados por la comunidad científica como una nueva epidemia al alza. Acorde con la Organización Mundial de la Salud, alrededor de 2.000 millones de adultos en el mundo tienen exceso de peso y esta tendencia continuará al alza. Un estudio realizado también en noviembre del año pasado por el Instituto de Salud Carlos III y la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, concluyó que el 55,6% de los adultos y un tercio de los menores españoles tienen exceso de peso.
Pilar de un estilo de vida saludable
La FAFO no propone un 'plan de choque' para adelgazar de forma rápida, sino que busca afianzar este tipo de alimentación como pilar de un estilo de vida saludable. Además, es una dieta que se adapta a las costumbres y a la economía de cada persona.
Se asemeja en gran parte a la dieta mediterránea: apuesta por las proteínas de calidad (pescado y carnes, evitando las rojas), las verduras, las frutas y las grasas 'buenas' (aceite de oliva, frutos secos, aguacate, huevos, aceitunas, etc.). Estos alimentos han de cocinarse de forma saludable y en una ración adecuada. Por otro lado, desaconseja totalmente los azúcares o los alimentos ultraprocesados.
Mediante esta dieta se puede adelgazar entre medio kilo y un kilo semanal, recordando siempre que forma parte de un estilo de vida, con lo cual se debería tener también una práctica habitual de actividad física.