Después de varios contratiempos, la marquesa de Griñón, Tamara Falcó, y su ahora esposo, Íñigo Onieva, han celebrado su esperada boda en el palacio El Rincón.
La ceremonia nupcial, oficiada con un retraso de 45 minutos, contó con la presencia de tres sacerdotes importantes en la vida de la novia: el padre Cruz, el padre José Luis y el padre Ángel. Concluyó alrededor de las 20:15 horas, después de un enlace lleno de emociones y simbolismo.
Tamara Falcó, conocida por su participación en la cuarta edición de Masterchef Celebrity, se ha convertido en una figura muy popular en los medios de comunicación. Su relación intermitente con Íñigo Onieva ha sido objeto de atención, lo que ha generado aún más expectación en torno a su boda.
El Rincón, el escenario de la boda
El lugar elegido para la celebración, el palacio El Rincón, tiene un valor sentimental especial para Tamara, ya que era una propiedad muy querida por su difunto padre, Carlos Falcó, además de su residencia habitual. Ahora pertenece a Tamara y a su hermano Manuel.
Su impresionante jardín, la capilla y la privacidad que ofrece el lugar hicieron que fuera la elección perfecta para el enlace.
Efímero, reconocida por su habilidad para crear ambientes impresionantes, ha sido la encargada en la decoración de la boda mientras que Eneko Atxa, chef español y propietario del prestigioso restaurante Azurmendi con cinco estrellas Michelin y los platos regados con los vinos del Marqués de Griñón.
Algunos de los invitados
Entre los invitados estaban su primo Álvaro Falcó y su esposa, Isabelle Junot;, el diseñador Juan Avellaneda, la modelo Eugenia Silva, la pareja formada por Christian de Hannover y Alessandra de Osma, o sus compañeros de El Hormiguero: Pablo Motos, Cristina Pardo, Juan del Val y Nuria Roca.
El diseño del vestido de novia fue creado por Carolina Herrera, con el director creativo de la firma, Wes Gordon que se ha trasladado a Madrid para ultimar los detalles finales de un diseño creado a contrarreloj para lo que suele ser habitual, y del que la marca no ha querido ofrecer ningún detalle al "tratarse de un evento privado", han comentado a EFE.
Tampoco sobre el vestido de Isabel Preysler, que luce un modelo de Carolina Herrera de colección, adaptado en color y patrón para la ocasión.
Entre las joyas destacadas de la novia se encuentra una tiara que perteneció a su abuela paterna Hilda así como unos pendientes de alta joyería diseñados especialmente para la ocasión por la marca Tous, con la que Tamara colabora regularmente.
La boda de Tamara Falcó y Íñigo Onieva ha sido una celebración de tres días que incluyó una cena preboda, la ceremonia nupcial y concluirá con una comida este domingo. Se espera que la pareja parta de luna de miel después de los festejos.
Con esta espectacular boda, Tamara Falcó y Íñigo Onieva han sellado su amor en un evento que ha capturado la atención de la prensa y ha dejado un legado de momentos emocionantes y memorables para la pareja y sus seres queridos.