El hombre falleció en Cordenons, en la provincia de Pordenone (norte) cuando conducía por una carretera que había sido cortada cerca de un torrente y fue sorprendido por el desbordamiento. Mientras que esta mañana, la marea alta en Venecia registró 120 centímetros, pero para mañana el Centro de Previsión de Mareas del Ayuntamiento espera un pico de 135 centímetros en las primeras horas del día.
Aunque lejos de los 184 centímetros del pasado noviembre que inundaron el 70 % de la ciudad causando daños por millones de euros.
Esta subida de la manera se considera como alerta naranja, ya que solo cuando supera los 140 centímetros se produce la alerta roja y se toman medidas como detener el transporte público de los "vaporetti", así como se cierra el acceso a la plaza de San Marcos, uno de los puntos más bajos de la frágil ciudad.
En una rueda de prensa este viernes, los hoteleros venecianos lamentaron que desde que se produjo la marea excepcional del 12 de noviembre "ha habido un pico de cancelaciones del 45%, mientras se siguen cancelando eventos, conferencias y otros actos importantes
programados en la ciudad hasta la próxima primavera".
El presidente del gremio de hoteleros de Venecia señaló que si bien Navidad nunca ha sido un período de plena ocupación, "un hecho sorprendente es el del Año Nuevo: si el año pasado la ocupación fue del 100 %, este año es inferior al 50 %". Lluvias, fuertes vientos y costas azotadas por las tormentas han hecho que se decrete la alerta naranja en las regiones de Basilicata, Campania, Emilia Romagna, Friuli Venecia Giulia, Lacio, Liguria, Lombardía, Molise, Cerdeña, Toscana y Umbría y amarilla en Calabria, Piamonte y Veneto.