A pesar de tener 11 serpientes ya en su casa, una mujer de Ohio, EEUU, decidió acoger a dos más, en concreto dos boas constrictor. Sin embargo, a las pocas horas, una de ellas se abalanzó sobre elle y le mordió la nariz mientras se encontraba enroscada a su cuello, según informa 'The New York Post'.
En ese momento, la mujer llamó al servicio de Emergencias: "Tengo una boa constrictor en la cara". Al escuchar sus palabras, el operador, atónito, no podía creer lo que estaba realmente escuchando: "Señora, ¿tiene un qué?".
"Hay sangre por todos lados", le explicó la mujer. Entonces, preguntada sobre si tenía algún tipo de dificultad para respirar, la mujer señaló que a pesar de todo no y pidió y pedía que se dieran prisa.
Los Bomberos llegaron al domicilio de la mujer, donde la encontraron tirada en el suelo con la serpiente rodeándole la cara y el pecho y mordiéndole la nariz, según ha explicado uno de los bomberos. En ese momento, tuvieron que cortar la cabeza de la serpiente con un cuchillo para lograr liberar a la mujer.
Instantes después, fue trasladada al hospital, donde se recupera de las heridas que, afortunadamente, no suponen un riesgo para su vida, según las autoridades locales.