El anteproyecto de ley de protección y bienestar animal aprobado por el Gobierno regula la relación de los propietarios con los animales de compañía y castiga el maltrato, el abandono y el sacrificio de los animales.
En la nueva norma también se hace distinción entre los animales de compañía y aquellos que son utilizados como instrumento. Es decir, hay perros de compañía y perros para la caza o el pastoreo. En esta distinción no se tiene en cuenta la raza, ya que muchos perros con instinto cazador pueden ser animales de compañía y no participar en actividades de caza o pastoreo.
En el anteproyecto de ley se incluyen dos artículos dedicados a los perros de caza y pastoreo y guarda de animales. En ambos casos los propietarios están obligados a inscribir a los animales en el registro de animales de compañía por desarrollar, y deberán estar vinculados a la licencia de caza o al registro de ganadero del responsable o propietario. Asimismo, si se quiere criar con ellos es obigatorio inscribirse en el registro de criadores, cuyas condiciones aún no se han especificado.
Curso para los propietarios
Otro punto novedoso de la nueva norma, es el artículo 36 donde se habla sobre la formación para la tenencia de perros. Aquí se indica que, "las personas titulares o responsables de los perros deberán haber realizado un curso de formación acreditado".
Los trámites, gestión y el contenido del curso están aún por determinar.
En ese sentido, los propietarios de los perros también deberán tener un seguro de responsabilidad civil y deberán cumplir con "los criterios de clasificación por sociabilidad, cumpliendo los mecanismos de validación de comportamiento y socialización determinados reglamentariamente".
¿ Y si no tengo el curso?
Los perros de caza, pastoreo y guarda de ganado que no dispongan de pruebas de sociabilidad se clasificarán como "perros de manejo especial fuera de la actividad específica".
El anteproyecto de ley elaborado por el Ministerio de Derechos Sociales podría entrar en vigor antes de que acabe 2022.