Son algunos de las novedades que Tráfico ya está estudiando y que su máximo responsable, Gregorio Serrano, ha apuntado en la comisión de Seguridad Vial del Congreso, donde ha detallado las líneas generales de actuaciones de la DGT para esta legislatura, en la que este departamento planea cambios en los exámenes de conducir.
Así, Serrano ha avanzado que Tráfico se plantea la introducción en la prueba teórica de la emisión de vídeos sobre situaciones de riesgo en la conducción sobre las que el alumno tenga que elegir la mejor manera de actuar.
Un cambio que se enmarca en el reto de que en 2018 todos los exámenes teóricos sean igual, estén informatizados y no exista el papel, con la finalidad de evitar la "picaresca", las "trampas" y de que se finalice con la "memorización" de las 19.500 preguntas que forman parte de la base de datos de los exámenes.
Además del teórico, Serrano también ha avanzado que su departamento quiere retocar el examen práctico, de forma que el examinador le podrá indicar al aspirante que introduzca una dirección en un GPS y siga sus introducciones al volante para llegar a ese destino.
Serrano ha indicado que el 60 por ciento de los alumnos aprueba el teórico, si bien finalmente un 52 por ciento no supera el examen práctico, una situación que, ha dicho, "colapsa el ritmo" de algunos centros de exámenes.