A la hora de conducir, muchas personas al volante no ajustan adecuadamente sus espejos laterales. Lo que seguramente no sepan, es que un mal ajuste puede originar puede dar como resultado puntos ciegos peligrosos y aumentar el riesgo de colisiones con ciclistas u otros coches.
Los retrovisores son esenciales para la seguridad y el manejo adecuado del vehículo al conducir, ya que cumplen funciones muy importantes para una conducción correcta y segura:
- Visibilidad y conocimiento del entorno: los retrovisores permiten al conductor ver el tráfico que se aproxima por detrás y los vehículos que se encuentran a los lados, lo que es crucial para tomar decisiones informadas. Además, ayudan a reducir los puntos ciegos significativamente y permiten a los conductores ser conscientes de los vehículos que se aproximan.
- Maniobras y cambios de carril: son elementos fundamentales para realizar estas acciones, ya sea para asegurarse de que el carril deseado esté despejado, como para realizar adelantamientos a otro vehículo con seguridad o incorporaciones en carreteras y autopistas.
- Estacionamiento y marcha atrás: proporcionan una vista clara de lo que está detrás del vehículo, ayudando a evitar colisiones con otros vehículos, peatones u obstáculos. Además, son esenciales para maniobrar y alinear correctamente el vehículo durante el estacionamiento paralelo.
- Seguridad en intersecciones y prevención de accidentes: los retrovisores permiten a los conductores verificar si hay ciclistas, peatones u otros vehículos acercándose antes de girar o cruzar una intersección. En caso de una situación de emergencia, como un frenazo repentino, los retrovisores permiten al conductor evaluar si hay vehículos detrás que podrían no detenerse a tiempo, permitiendo tomar acciones evasivas.
Consejos para el uso efectivo de los retrovisores
- Revisar frecuentemente: Haz un hábito de revisar los retrovisores cada pocos segundos para estar siempre consciente de tu entorno.
- Uso combinado: Utiliza los retrovisores en combinación con girar la cabeza para verificar puntos ciegos, especialmente antes de cambiar de carril o girar.
- Mantenerlos limpios: Asegúrate de que los retrovisores estén limpios y en buen estado para proporcionar la mejor visibilidad posible.
Aparte de todas estas acciones, lo más importante es que ambos retrovisores tengan un ajuste adecuado. Antes de empezar a conducir, ajusta los retrovisores para tener una vista clara y amplia de los lados y la parte trasera del vehículo.
Según los expertos en seguridad vial, es recomendable extender los espejos laterales hacia afuera hasta que los bordes exteriores del vehículo sean visibles en ellos. De esta manera, se maximiza el campo de visión y se minimizan los puntos ciegos, permitiendo una mejor percepción de los coches en los carriles adyacentes.
