Cristina Pedroche, que ha dado las campanadas junto al cocinero Alberto Chicote en Antena 3, ha lucido un diseño con dos piezas: primero un abrigo que simula un edredón deconstruido y después un micro vestido joya, ambos de Pedro del Hierro.
Inspirándose en una mascarilla, Nacho Aguayo, director creativo de los diseños de mujer de Pedro del Hierro, ha creado un vestido joya "que se sujeta al cuerpo con un colas de ratón que simulan las tiras de la mascarillas", ha explicado por teléfono momentos antes de la retransmisión de las campanadas.
"Cristina quería llevar luz y esperanza a todos los españoles"
Aguayo considera que confeccionar este diseño es una "oportunidad para homenajear a todos los que se han quedado en casa". Reconoce que ha sido una decisión difícil porque "siempre habrá plausos y críticas", pero también se siente orgulloso y afortunado: "Ha sido una bonita forma de poner un broche de oro a un año horrible".
En este conjunto Aguayo, en colaboración con el famoso bordador de alta costura Johan Luck Katt, recupera la artesanía del bordado para crear un diseño único con el que Cristina Pedroche ha querido dar un menaje de ilusión. "Desde el principio, la obsesión de Cristina era llevar luz a los hogares", subraya Aguayo, quien detalla que este conjunto son dos vestidos en uno.
Diseño "Confinamiento Couture"
Este diseño, denominado por el estilista Josie como "Confinamiento Couture", se ha presentado en dos secuencias. En la primera, se ha visto un abrigo edredón. "Una pieza gigante deconstruida como si nos abrigáramos con una edredón, una prenda que recuerda a las mantas y chales que tanto nos han acompañado en el confinamiento", dice el diseñador, quien detalla que se ha confeccionado con una tafeta de seda reciclada con tintes ecológicos de la que se han empleado más de 100 metros.
En la segunda secuencia se ha visto un mini vestido joya, inspirado en las mascarillas que ahora forman parte de la indumentaria habitual. "Una única pieza bordado con 16.308 piedras de cristal, en el que se han empleado 350 horas bordando piedra a piedra", dice Aguayo, quien reconoce que este diseño tiene un aire "lúdico y festivo, porque la moda tiene que tener un punto de fantasía"
Un conjunto que se ha completado con botas de caña alta totalmente bordadas, hechas en raso de seda en azul, que recuerda al color de las mascarillas.