Tyler Boone, un pequeño de 10 años de Georgia, se ha dejado crecer el pelo durante dos años para que su amiga Gabby, con alopecia, se pudiera hacer una peluca con él. Tyler se dejó crecer el pelo hasta aproximadamente los 30 centímetros, de modo que su amiga se asegurase una buena peluca.
En el diario Metro, Tyler ha explicado que recibió burlas de otros niños por su larga melena, y en un par de ocasiones fue confundido con una chica, pero mereció la pena al poder ayudar a su amiga.
Ambos son amigos desde que eran bebés, y aunque ahora viven a cientos de kilómetros de distancia, sus familias se reunieron para que Gabby pudiera hacer los honores y cortarle el pelo a su amigo.