El joven leonés Sergio Álvarez, cuya foto del Documento Nacional de Identidad (DNI) con un palillo en la boca se ha vuelto viral en los últimos días, deberá rectificar y hacerse una nueva identificación.
El chico ha explicado que el pasado jueves recibió una llamada de la Policía Nacional en la que se comunicó que debería entregar el DNI de la polémica y hacerse uno nuevo.
"Eso sí, me precisaron que no había cometido ninguna ilegalidad o irregularidad, y que simplemente se tomaba la medida para evitar sentar un precedente", ha explicado el joven, que ha admitido que al principio pensó "en dar la batalla" por defender su derecho a portar el palillo, aunque al final, "para evitar líos", ha decidido rectificar.
Además, la Policía Nacional le ha advertido de que el DNI de la polémica será invalidado, por lo que si no se saca uno nuevo estaría indocumentado, lo que, como mínimo, conlleva una sanción administrativa.
La "broma" había quedado en su círculo más íntimo "como una anécdota graciosa sin más", hasta que el pasado miércoles se hizo eco de la misma el diario digital Leonoticias "y entonces la cosa se disparó" y empezaron a llamarle "de todos lados". Ese fue también el motivo de que llegará a oídos de la Policía que ha dado al joven "un plazo razonable" para que solvente la irregularidad.
"Me han dicho que no puedo quedarme con el DNI del palillo una vez que esté anulado, pero voy a hacer todo lo posible por conservarlo como testimonio de lo sucedido", ha manifestado el joven.