Sabemos que en todas las bibliotecas del mundo hay una norma que está por encima de cualquier otra; la de guardar silencio. Sin embargo, esto no ha sido así en Nanchang, China. Allí tuvo lugar una discusión que tan solo se hubiera quedado en una anécdota de no ser porque sus protagonistas eran dos robots.
La disputa comenzó cuando una lectora escaneó el código QR de uno de los robots programados que ayudan e informan a los visitantes de la biblioteca. En ese momento, la otra máquina se acercó a su compañero y ambos empezaron a discutir en medio de todo silencio. Uno de ellos llamó "molesto" al otro por entorpecerle en su puesto de trabajo.
La mujer, entre risas, comenzó a grabar los hechos y procedió a compartirlos en las redes sociales. La revolución que ha supuesto la inteligencia artificial ha provocado que haya máquinas que incluso pueden pensar y razonar por su cuenta y que cada vez sean más capaces de imitar al humano.
