1. Nunca la vida fue tan dulce
París, 15 de julio de 1789. Los pasquines que ridiculizan a la reina María Antonieta vierten también rumores sobre Teresa Cabarrús. Un viejo amigo de su padre le trae inquietantes noticias.
Durante los 15 años entre la Revolución Francesa y la coronación de Napoleón, París decidió el destino de Occidente. Allí mantuvo su reino Teresa Cabarrús. Su influencia le valió el título de Nuestra Señora de Thermidor
París, 15 de julio de 1789. Los pasquines que ridiculizan a la reina María Antonieta vierten también rumores sobre Teresa Cabarrús. Un viejo amigo de su padre le trae inquietantes noticias.
Burdeos, 30 de abril de 1793. París arde en llamas. El rey Luis XVI ha sido decapitado y los Comités Revolucionarios asesinan a cualquier sospechoso, sea noble o plebeyo.
Comienza el llamado Gobierno del Terror. Teresa conoce a Tallien, delegado de Robespierre en Burdeos. De él depende la vida y la muerte de todos los habitantes de la ciudad.
Teresa vuelve a París, Robespierre emite una orden de arresto contra ella, y, a traición, es encerrada en la Force de París. Allí le aguarda la guillotina.
Teresa recibe en su casa un listado interminable de personas que le suplican un salvoconducto, la indulgencia o el perdón. Es la oportunidad de elegir a los nuevos amigos...y enemigos.
Francia vive un estallido de vida y de alegría. Nunca el mundo perteneció tan claramente a los jóvenes. Entre los admiradores de Teresa, un joven militar destaca con luz propia: Napoleón Bonaparte.
Los salones de poetas y filósofos han sido sustituidos por fastuosas fiestas. Parece que hayan vuelto los tiempos del Antiguo Régimen, pero ¿Cuánto durará esto?
Napoleón, el rutilante vencedor de las campañas en Egipto, ha regresado a Francia, y es nombrado Cónsul. Al día siguiente llama a Teresa: quiere hablar con ella.
Teresa sabe que es la comidilla de todo París, y cada vez se encuentra más sola. Tallien, desde Londres, fantasea con la posibilidad de revivir su amor.
Los antiguos fantasmas asedian a Teresa. Solo tiene 31 años, pero ha vivido ya muchas vidas. ¿Habrá algún lugar al que huir, algún lugar donde pueda comenzar de nuevo?