En el episodio se describe cómo los británicos comparaban a Seve Ballesteros con un matador de toros por su valentía y arte en el campo de golf. Sin embargo, en España Ballesteros no recibió el mismo reconocimiento y apoyo, ya que el golf era visto como un deporte elitista.
A pesar de ello, Ballesteros luchó por promover el golf y hacerlo más accesible al público español. Finalmente, con el paso del tiempo, su legado y contribución al deporte fueron más valorados, como demuestra el hecho de que el aeropuerto de su ciudad natal lleve su nombre.
Créditos
- Dirección: Pablo González Batista y Conchi Cejudo
- Producción: Iván Pérez
- Guion: Gonzalo Cabeza
- Narración: Matías Prats
- Música: Miguel Marcos
- Diseño sonoro: Guillermo García