Este jueves se celebra el Día Internacional de la Danza, una expresión artística que permite a quienes la practican no sólo pasar un buen rato, sino también expresarse sin barreras idiomáticas o culturales.
No obstante, tal y como recoge Quirónsalud, esta actividad también puede someter a nuestro sistema musculoesquelético a un gran desgaste, sobre todo si no somos cautelosos con las posturas y no cuidamos nuestros pies.
Para evitar daños mayores y poder disfrutar del baile en toda su extensión, el traumatólogo de Quirónsalud Tenerife el doctor Ricardo Visiedo nos ofrece una serie de consejos orientados a reducir los daños que esta actividad puede provocar en nuestro organismo independientemente del estilo y género que más nos guste.
- Inspeccionar siempre nuestros pies en busca de callosidades, heridas y uñas mal cortadas para evitar daños innecesarios en forma de heridas o dolores que se pueden producir durante horas y horas de práctica.
- Mantener un correcto balance muscular de nuestras piernas, fortaleciendo toda la musculatura de forma homogénea.
- Realizar estiramientos y masajes de nuestros pies y tobillos de forma frecuente para evitar la sobrecarga.
- Trabajar la propiocepción es de los gestos más importantes si queremos evitar lesiones ligamentosas e incluso fracturas.
- Consultar con los profesionales antes de empezar cualquier actividad de danza y siempre acudir a consulta ante la aparición del dolor.
Por último, el especialista en Traumatología y Cirugía ortopédica y miembro de la Unidad del pie de Quirónsalud Tenerife apunta que las lesiones más comunes asociadas a esta actividad son los esguinces de tobillo, la metatarsalgias y el síndrome de atrapamiento nervioso, que está directamente relacionado con el tipo de calzado que se utilice al bailar.