El sedentarismo se perfila como una de las causas de mortalidad del mundo. Es consecuencia directa del desarrollo de diversas enfermedades, tales como la obesidad y el sobrepeso. Además, evitar el sedentarismo ayuda a reducir la aparición de enfermedades cardiovasculares, diabetes e hipertensión.
Tal y como recoge OK Diario, según la Organización Mundial de la Salud, al menos un 60% de la población mundial no realiza la actividad física necesaria para obtener beneficios para la salud, y ello es por llevar una vida sedentaria.
-Aumentamos el colesterol: El sedentarismo es responsable directo de variedad de enfermedades. En este caso, podemos decir que aumenta el colesterol malo, puesto que no permite que hagamos una vida saludable.
-Aumento de peso:Ello lleva implícito el desarrollo de determinadas enfermedades.
-Problemas de salud mental:Según la OMS, se ha demostrado que el ejercicio físico mejora la salud mental y la función cognitiva de los adultos mayores y que contribuye al tratamiento de trastornos como la ansiedad o la depresión.
-Aumento de la obesidad:La causa fundamental del sobrepeso y la obesidad infantiles es el desequilibrio entre la ingesta calórica y el gasto calórico.
-Rebajamos nuestra capacidad pulmonar: Cuando hacemos ejercicio, la capacidad pulmonar aumenta y es mucho más profunda y abdominal.
-Tenemos menos defensas:Cuando nos movemos, practicamos ejercicio y tenemos un estilo de vida saludable, los glóbulos blancos encargados de las defensas del organismo aumentan. Y son más resistentes ante ataques de patógenos bacterianos, víricos o micóticos.
-Mal funcionamiento del aparato digestivo: Con el movimiento diario, el aparato digestivo se regula, pues las digestiones son mucho mejores y además se consigue regular el apetito.