Se acaba de celebrar el Día Mundial de la Salud Mental, que en 2023 tiene por lema «La salud mental es un derecho humano universal». Además, esta fecha sirve para tomar conciencia de la importancia que tiene cuidar nuestra mente en todos los aspectos.
Uno de los sectores que se ha sumado a esta conmemoración en su compromiso por velar por la salud de los ciudadanos son los boticarios.
Desde el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), que preside Jesús Aguilar, han publicano un informe técnico centrado en la esquizofrenia, una de las enfermedades que, según Organización Mundial de la Salud (OMS), provoca un mayor estigma, exclusión social y discriminación hacia las personas que la padecen.
En este documento, señalan que el farmacéutico es clave en el control de los síntomas de esta patología. Los signos más comunes incluyen distorsiones y alteraciones de la percepción, el afecto, la cognición y el comportamiento, pero ninguno de ellos permite por sí solo establecer el diagnóstico, sino que este se establece sobre la base de un conjunto de signos y síntomas persistentes en el tiempo que se asocian también a un deterioro en el funcionamiento laboral y social y a una pérdida en la autonomía del paciente.
Hay que recordar que la adherencia al tratamiento es un problema de especial relevancia en estos pacientes, por lo que la acción del farmacéutico a este respecto es fundamental.
En definitiva, con esta publicación los farmacéuticos se unen a la reivindicación del derecho a la salud mental y ponen de manifiesto la importante función que desarrollan en el control de los síntomas y en la mejorara de la salud de la personas que la padecen. Es lo que hay. Seguro.
