Ciudades y Parques Naturales

Los imprescindibles para un viaje perfecto a Sudáfrica

Tres meses en Sudáfrica es realmente un gran viaje para conocer a fondo un país que es incomparable, un gran destino viajero, que estoy seguro de que le va a gustar y mucho, es un país lleno de interés, incluso mucho más de lo que uno espera antes de ir. Todos contamos con que tiene una naturaleza espectacular, con que vamos a poder hacer safaris y con la posibilidad de visitar una mina de oro, pero hay mucho más.

Enrique Domínguez Uceta

Sudáfrica | 20.07.2024 13:49

Tiene una historia tan singular que no se puede comparar con la de ninguno de sus países limítrofes, ni siquiera con la de ningún otro país africano. Es una rareza absoluta y no sólo porque podamos ver en el mismo día leones y pingüinos, también por su economía, por la calidad de vida de la que pueden disfrutar los viajeros y por su composición étnica, en la que casi nunca incluimos la presencia de una importante comunidad india, además de los descendientes de los holandeses y la riqueza de etnias autóctonas, con una mayoría de zulúes, que estuvieron todas maltratadas por el régimen del apartheid, que acabó hace poco, en 1992 y luego Nelson Mandela llegó al poder en 1994, buscando una convivencia llena de dificultades y de lentos logros.

Sudáfrica
Sudáfrica | Pexels Taryn Elliott - 6790328

Sudáfrica en realidad tiene la economía más poderosa de África

Sin duda la más potente de África, porque aparte de tener recursos naturales, oro, diamantes, platino, tiene un enorme poder financiero y tiene muy desarrollado el sector servicios, tiene muchas de las empresas más potentes del continente y eso se nota cuando viajas por las grandes ciudades, sobre todo Johannesburgo, la capital, Ciudad del Cabo y Durban por ejemplo. Pero el problema del país es la desigualdad, que no ha desaparecido y de hecho el país ahora es más peligroso que hace unos años. Hay que tener cuidado y ya ira comprobando que el país es seguro dentro de unas pautas muy concretas, como Estados Unidos. Es peligroso equivocarse. Pero hay un mundo de lujo que vive en paralelo con la pobreza de las township, de los barrios marginales de población negra. Así que muchos viajeros pueden disfrutar de hoteles y restaurantes maravillosos, spas de lujo y campos de golf increíbles, sobre todo en el sur, en Ciudad del Cabo, que es una de las ciudades más vitales, divertidas y vibrante, con un estilo de vida californiano. El viaje vale la pena, porque Sudáfrica tiene de todo, dos océanos, el Atlántico y el Índico, todo tipo de paisajes, desde el de tipo mediterráneo hasta los desiertos, sabanas, zonas montañosas o de selva, ciudades impresionantes, y una fauna variadísima.

Johannesburgo
Johannesburgo | Pexels Thobile Nhlapo - 684897491-18264521

No debemos perdernos en ningún caso Johannesburgo

Es la gran ciudad económica y la puerta de entrada de los vuelos desde Europa y tiene algunas cosas de interés, es la ciudad del oro, levantada sobre una gigantesca mina de oro descubierta en el siglo XIX por un buscador australiano. Sin la mina de oro no existiría. Diez años después de abrir la mina, ya vivían allí 100.000 personas. La mina está agotada, pero Johannesburgo es la capital económica del país. Vale la pena visitar las minas de oro, ir a Gold Reef City, donde han reconstruido la ciudad minera de finales del XIX. Los mineros bajaban a 3500 metros de profundidad y los visitantes bajan 220 metros, con casco y linterna, como los mineros, y se recorre una parte de la mina. Es muy interesante. Y el otro gran atractivo es la visita de Soweto, un barrio de población negra, famoso por su lucha contra el apartheid, del que salió el movimiento que acabó con el sistema discriminatorio de la mayoría negra.

Es mejor ir a visitarlo con un guía o un grupo turístico. Es un barrio, pero acoge a cuatro millones de personas. Lo que se suele visitar es la casa de Nelson Mandela, en la única calle del mundo en la que han vivido dos premios Nobel de la Paz, el obispo Desmond Tutu y Nelson Mandela. La ciudad también tiene un museo del apartheid. El centro urbano financiero de Johannesburgo es grande y seguro en días laborales, pero los barrios son guetos separados por autopistas, es algo extraño y diferente. Yo recomendaría no perderse la excursión hasta Pretoria que está a menos de una hora y es una ciudad muy atractiva, con un centro lleno de edificios oficiales y diplomáticos, que destaca por su arquitectura colonial, sus museos y su tranquilidad. Y la otra excursión de lujo, a dos horas de la ciudad, es el complejo hotelero y de ocio Sun City, en medio del desierto, con un hotel fabuloso de cinco estrellas, The Palace of the Lost City, que es lo más parecido a Las Vegas, pero en el desierto de Sudáfrica.

Viñedos de Sudáfrica
Viñedos de Sudáfrica | Pexels - Stephanlouis - 5494694

El país es muy grande y hay cosas interesantes en todas partes

Tiene mucho que ver, Ciudad del Cabo es espectacular, frente a su bahía y al pie de la montaña de la Mesa, luminosa y radiante, con un centro muy bonito, con vida callejera y mercadillos y con una zona muy animada en el Victoria & Albert Waterfront, en torno al viejo puerto, que se ha llenado de tiendas, restaurantes y hoteles de lujo. Es la ciudad con mayor nivel y calidad de vida de toda África y está rodeada por playas esplendorosas para el baño, para el surf. Se come de cine y se bebe muy bien. Cerca de Ciudad del Cabo hay varias zonas de excelentes vinos, como trozos de Europa, en Stellenbosch y Franschloek. A mí me parece emocionante llegar al Cabo de Buena Esperanza, tan importante en las rutas de navegación antes de que se abriera el Canal de Suez, aunque el lugar más meridional de África es el Cabo Agulhas, que está a tres horas en coche, en una costa preciosa, visitada por ballenas, tiburones blancos, focas y pingüinos. Durban y toda la Ruta Jardín por la costa sur del país es espectacular y puede recorrerse con coche de alquiler.

Parque Kruger
Parque Kruger | Pexels - Pixabay - 38280

Para los safaris, la visita imprescindible es el Parque Kruger

El parque Kruger es enorme, estupendo, pegado a Mozambique y además lo puedes recorrer con tu propio coche, a tu aire, y se ven los animales porque hay desvíos que llevan a los bebederos más cercanos a la carretera principal. Teniendo tiempo merecen también el viaje el Parque Transfronterizo de Kgalagadi en Kalahari, junto a Botsuana. Estando en Sudáfrica debe acercarse a las Cataratas Victoria, a las que se puede llegar en uno de los trenes míticos de África, el Rovos Rail, que permite un viaje de lujo hacia el norte del país para llegar a las cataratas en la frontera entre Zambia y Zimbabue.

Otro escenario fabuloso es el de las montañas de Drakensberg, formidables, violentas y espectaculares, declaradas Patrimonio de la Humanidad, con pinturas rupestres de los bosquimanos y comunidades zulúes y buenas infraestructuras para recibir a los viajeros. Le recomiendo que conozca la Región Floral del Cabo, que cuenta con una vegetación absolutamente original, que forma una de las grandes familias florales del mundo y muchas de las plantas exóticas que hoy se extienden por otros países, provienen de la flora típica de El Cabo, le recomiendo el Jardín Botánico Kirstenbosch, en Ciudad del Cabo, que es uno de los mejores del mundo. Y si va a estar allí tres meses, coincidiendo con su primavera, que es nuestro otoño, puede estar pendiente de cuando llueve en Namaqualand, una región del oeste de Sudáfrica, muy árida, prácticamente de desierto, que florece de golpe cuando recibe algo de agua de lluvia, cosa rara, y de repente el desierto se convierte en un jardín porque florecen todas las especies a la vez y tienen apenas unos días para sacar las flores, ser polinizadas y generar las semillas. Esos días el desierto se convierte en un jardín, y en uno de los lugares más bellos del mundo.