Cuando los americanos se fijaron en la zona de Punta Cana no había nada, a finales de los 60 y principios de los 70, luego se construyeron los Altos de Chavón cerca de la capital y luego el grupo español Barceló empezó a construir un hotel en la playa de Bávaro, debían ser los ochenta cuando aquello se disparó y ha sido un negocio descomunal.
Es un lugar destino donde se invierte muchísimo, no sólo desde España, también y sobre todo, desde Estados Unidos.
Primero fue playa Bávaro, luego su vecina zona de Punta Cana, donde crecieron una colección de hoteles ya de superlujo, a menudo con la modalidad de Todo Incluido y donde pronto hubo mucha inversión de Estados Unidos y de Canadá. Gracias a esos norteamericanos ahora triunfa otra modalidad de complejos turísticos grandes que responden a la fórmula de condohotel, que es una mezcla de condominios de apartamentos pero que se gestionan como hoteles. Eso atrae muchos pequeños inversionistas que compran allí su apartamento. Y es curioso, porque cuando viajas por el país encuentras muchísimos apellidos europeos, muchos de los países del este y también de Norteamérica. En ese aspecto, República Dominicana es un país interesante desde hace muchos años, porque acoge inversionistas que llegaban con dinero de todas partes del mundo. También es curioso e interesante ver cómo dos países contiguos que comparten la misma isla de La Española, como son Haití y República Dominicana, tienen historias tan divergentes, uno está sumido en el caos y en la miseria, Haití y otro es tan próspero y seguro como República Dominicana.
La mayor parte de los viajeros españoles van a la República Dominicana buscando sus buenas playas y la calidad de los hoteles.
Seguramente muchos de nuestros oyentes ya conocen o incluso han viajado a lugares tan hermosos como Punta Cana, Bávaro, Cap Cana, o a ciudades de la costa cargadas de historia como es la capital, Santo Domingo, o Puerto Plata, en la costa norte, pero hay otros muchos sitios dignos ser mejor conocidos, como Samaná, Montecristi, Cabarete, Río San Juan, San Pedro de Macorís, Bayahibe o Juan Dolio, porque todos ellos también están en la costa y tienen estupendos hoteles y cantidad de actividades para disfrutar de espacios naturales magníficos. Pero también es muy interesante el interior de la isla, lugares menos conocidos como Santiago de los Caballeros, una ciudad cargada de historia, que lleva el nombre del Apóstol Santiago y se llama de los caballeros porque los primeros en vivir allí fueron 30 caballeros de la orden de Santiago el Mayor y estamos hablando de 1515, pero a mí me gusta recordar que quizá sea la ciudad más auténticamente dominicana.
Santiago es conocida en el país como la ciudad corazón
Es ciudad corazón porque Santiago es capital del valle del Cibao, que se extiende al pie de las altas montañas que tiene la República Dominicana y que casi nadie visita. Ese valle del Cibao es el corazón y el estómago del país, porque de las montañas baja el agua del río Yaque del Norte, con la que se riega el valle, que produce café, cacao, arroz, tabaco, allí se da todo bien. Gracias a eso es un territorio de riqueza permanente, por agricultura y por las industrias de transformación, que mantienen a los tres cuartos de millón de personas de la segunda ciudad del país, que es la más sólida y tradicional, cuna de muchas fortunas y de muchos políticos y sobre todo, el mejor sitio para conocer el país sin estar rodeados por turistas, y además tiene buenos museos y monumentos.
Una manera diferente es conocer el interior antes de ir a las playas
En realidad, las zonas más turísticas para nosotros son las del norte, las de la costa norte. Santiago está también en el interior pero al norte, así que podemos ir primero a Santiago y luego seguir hacia el norte en busca de Puerto Plata, que es la ciudad histórica que está en la costa norte. Puerto Plata tiene también un bonito casco urbano y muy buenas playas, con hoteles grandes y hoteles boutique preciosos. Por eso esa costa norte, de Puerto Plata a Punta Cana, tiene sitios formidables y bastante auténticos, con playas en el Atlántico, que no se diferencian nada de las del Caribe, que, en realidad, es el mar del sur. En el recorrido por la costa norte se ensartan Monte Cristi, Luperón, Cofresí y Puntambar, Puerto Plata con Playa Dorada, Sosua y Cabarete y la península de Samaná donde están los hoteles españoles de Bahía Príncipe, con el exclusivo Cayo Levantado, asomados a la bahía de Samaná, en esa península llena de lugares bellos y seguros, tranquilos, en Sánchez, Las Terreras, El Portillo, Playa Bonita, Las Galeras, y luego, ya en la punta este de la isla, están Bávaro, Punta Cana y Cap Cana, que forman uno de los principales destinos turísticos de todo el Caribe.
Es uno de los países más atractivos del Caribe
República Dominicana se da el lujo de tener playas estupendas en dos mares, en el Atlántico y en el Caribe y aunque el Caribe lleva la fama, las playas del Atlántico están entre las mejores del mundo. El país también puede presumir de tener el pico más alto de las Antillas Mayores, el Pico Duarte y cuenta con paisajes alpinos en la subida hacia la cumbre y tiene otros paisajes casi desérticos, como los que rodean el lago Enriquillo, donde todavía quedan cocodrilos y tiene esa maravillosa península de Samaná que es una maravilla de la naturaleza, tranquila, bellísima, un paraíso natural, que encierra la bahía a la que van las ballenas a pasar el invierno.
Incluso culturalmente es formidable, porque las primeras instituciones europeas en América se iniciaron en la capital, en Santo Domingo, hace ya más de cinco siglos, la primera catedral, el primer hospital, la primera casa de aduanas y la primera universidad de las Américas y ha quedado una zona histórica que es una preciosidad.
Y ese turismo que llena los hoteles de Punta Cana es de alto nivel económico, que sustenta un mundo de lujo que a veces nos cuesta visualizar desde aquí.
Especialmente en la zona de Cap Cana, que es un verdadero emporio de lujo muy apreciado por los norteamericanos, que buscan gran calidad cuando viajan en invierno hacia el cálido Caribe y encuentran tiendas de marcas de lujo y galerías de arte. Habían calculado que el turismo de lujo podría mover más de 200.000 millones de dólares antes de la pandemia, y eso ha atraído a muchos inversores. La verdad es que República Dominicana es líder en turismo en la región del Caribe. Así que no es extraño que a República Dominicana vayan muchos inversores además de muchos turistas.
