Campos de té

Ruta de yoga, naturaleza y surf por Sri Lanka

Un viaje que arranca en la cima del Sri Pada, conocida como Adam’s Peak, la montaña sagrada o Pico de Adán, que se alza a 2250 metros de altura sobre el nivel del mar. Una subida de once kilómetros, 5300 escalones y 1000 metros de desnivel positivo, que budistas, hinduistas y cristianos hacen a modo de peregrinación en diciembre, para venerar el primer contacto de Buda o Adán, (dependiendo de a quién preguntes) en la tierra y donde al atardecer podemos meditar escuchando la música ceremonial y los rezos que resuena en sus laderas.

Víctor Herranz

Sri Lanka |

Sri Lanka es una hermosa isla al sur de la India, conocida históricamente como Ceylon, donde arranca ahora su temporada alta, la temporada seca y sin monzones, al menos en su zona sur y hasta donde llegan ya viajeros de todo el mundo buscando olas para surfear, experiencias espirituales en torno al budismo y paisajes naturales únicos en el mundo. Es muy recomendable iniciar este viaje con el peregrinaje al centro espiritual del país y es algo que nos confirmaron los monjes que custodian la pagoda en la cima del Sri Pada; que no hay mejor manera que cargar el espíritu de buenas energías locales y alguna que otra bendición budista a lo largo de la subida, para arrancar con buen pie y bendecidos. Por cierto las bendiciones vienen con un lazo en la muñeca y una donación para ayudar a los monjes a mantener las pagodas.

Pico de Adán
Pico de Adán | Miguel Cespedes

Sri Lanka produce el té Ceylon que es uno de los mejores del mundo

Llegar hasta uno de los 6 senderos por los que se puede acceder a la base del Pico de Adán es algo único, ya que tenemos que atravesar unos paisajes dignos de una postal entre montañas escarpadas y tapizadas de verde, caudalosos ríos y desfiladeros, donde por cierto se puede hacer rafting, carreteras zigzagueantes entre colinas y lagos de ensueño que abastecen de agua infinitos campos de té a lo largo del camino, que recordemos. Todo esto configura desde que dejamos atrás el aeropuerto de Colombo (que por cierto está en Ngombo no en Colombo) una inmersión en el país a través de pueblos con Hatton y aldeas como Nallanthanni en mitad de la selva tropical, desde donde iniciar la subida y donde hay todo tipo de alojamientos únicos que podemos reservar una vez lleguemos, como recomendación el Adams Peak Inn. Y llegamos al destino por supuesto de la mano de taxistas que son conductores de rally, porque ojo como conducen. Algo que sin duda nos hace despertar del letargo de 11 horas de vuelo, normalmente con escala en los países del golfo Pérsico, o en vuelo directo desde Londres con British, para quien no quiere hacer escalas.

Templo del Sri Pada
Templo del Sri Pada | Víctor Herranz

Lo típico es subir de noche y a la luz de la velas para ver amanecer

Pasas por varios tipos de clima, paisajes y escenarios, cruzándote en el camino pagodas, puestos de comida encaramados en la roca, zonas de selva, otras de roca viva y cataratas. Una vez arriba te sientes como en la cima del Himalaya y puedes no solo disfrutar de las vistas, sino de los rezos y la espiritualidad del momento o hacer una ofrenda al lugar sagrado en la cima. Por cierto puedes tocar la campana una vez por cada subida y tanta es la devoción que hay gente que iba con muletas y que le faltaba alguna pierna que tocaba hasta 10 veces la campana.

Ferrocarril entre Eliyah y Ella
Ferrocarril entre Eliyah y Ella | Víctor Herranz

Sri Lanka es un destino íntimamente ligado al ferrocarril

El ferrocarril es una de las mejores opciones para moverse por el país. En Sri Lanka están operativas actualmente cuatro líneas principales de tren (además de alguna más pequeña) que se distribuyen para conectar todo lo largo y ancho del país. En función del punto de destino, puede ser necesario combinar el trayecto en tren con un bus o un tuk-tuk. El objetivo de crear una red ferroviaria tan completa fue el de transportar té desde las plantaciones más altas hasta la ciudad de Colombo donde se comercializaba o donde se exportaba a través de rutas marítimas. Son trenes con solera pero mucho más cómodos de lo que la gente puede pensar y los paisajes son únicos dada la gran cantidad de montañas y colinas del país, hay gente que usa las vías como caminos por lo que son lentos y van con las puertas abiertas por lo que no es raro ver a la gente colgada de ellas para sentir los aromas del país o hacerse una foto.

No es peligroso pero hay que tener cuidado al hacernos un selfie en los trenes porque hay túneles y mucha vegetación y varias personas se han caído del tren en marcha. Como recomendaciones para viajar en tren, es hacerlo entre las ciudades de Kandy, Hattón, Eliyah donde está una preciosa ciudad colonial entorno al té y Ella, un destino algo turístico pero con excepcionales paisajes, cataratas de ensueño donde podemos ver elefantes salvajes por la noche (cuidado que son peligrosos) monos, todo tipo de aves y rutas de senderismo como el pequeños Pico de Adán, Ella´s Rock o el Puente de los 9 Arcos, famoso en el mundo entero por las fotos que se hacen allí. Sí vamos a visitarlo mejor ir al alba que a medio día y cuidado con el tren que está en funcionamiento.

Elefantes asiáticos en Sri Lanka
Elefantes asiáticos en Sri Lanka | Miguel Céspedes

Sri Lanka es el lugar del mundo con mayor población de elefantes asiáticos

Principalmente en las reservas o en torno a reservas como Udawalawe. No hace falta entrar en la reserva, sobre todo a primera hora con el resto de la gente, mejor o por la tarde o paseando en torno al parque. También en la zona este del país, donde no hay separación entre la reserva y las aldeas, podemos verlos cruzar las carreteras. Importante no darles de comer y mantener una distancia porque son animales salvajes. Es interesante que el país tiene al pavo real como su animal sagrado y constantemente podemos ver monos, águilas y sí tenemos suerte guepardos. En cuanto a animales marinos por cierto su costa sur es zona migratoria de ballenas azules pero los fondos no son muy buenos para bucear después del paso del tsunami, aunque sus aguas son hermosas, azules y en algunas zonas con tonos esmeralda. Por cierto que estamos en zona de monzones y de vez en cuando alguno nos cae, aunque hace tanto calor que se puede seguir con el día a día.

Playas entre Talpe y Ahangama
Playas entre Talpe y Ahangama | Víctor Herranz

Llegan surferos de todo el mundo a disfrutar de sus playas paradisíacas y olas

Sobre todo en esta época en la costa sur entre Fort Galle, una ciudad colonial holandesa que todavía conserva su fuerte y su arquitectura, hasta Tangalle. Sin embargo, la zona más surfera es la de Ahangama y Weligama donde los viajeros van a disfrutar de la temporada de surf vivir una experiencia a fuego lento y con mucho sabor, atardeceres y chiringuitos de ensueño. Esa es la magia del surf, una delicia de vida de día y de noche que discurre entre la selva, los campos de arroz, las palmeras y el océano, en moto por la carretera de la costa, atardeceres de ensueño, relax, alojamientos impresionantes a muy buen precio y una exquisita comida local basada en arroz con curry, kottu el plato más típico, samosas, roti, chicken curry, noodles fritos, cing coconut y muchísima fruta y es importante respetar a todo el mundo, sobre todo a la hora de practicar surf.

Araliya Villa - Ahangama - Sri Lanka
Araliya Villa - Ahangama - Sri Lanka | Víctor Herranz

viajando por la costa cada spot cambia totalmente

La verdad es que a diferencia de otros sitios con mayores localismos, aquí hay mucha paciencia a pesar de los choques entre surfistas y en medio a esa mezcla entre naturaleza, surf, atardeceres, budismo y buen vibra hay también momentos para la meditación. Hay un montón de centros de yoga y retiro como Senses Yoga Studio & Retreat en Weligama, un centro de cura espiritual y física en un entorno paradisíaco, de esos que solo podemos encontrar en el sudeste asiático rodeado de campos de arroz y naturaleza en estado puro, donde liberarnos del estrés y disfrutar de nuestra espiritualidad o hacer algo de deporte en contacto con la naturaleza y arrancar el día con una sonrisa.