Uzbekistán

A través de la Ruta de la Seda por Bukhara y Khiva

El Uzbekistán a través de la Ruta de la Seda y saliendo desde Tashkent y por la mítica Samarcanda encontramos un viaje realmente excepcional, de los que imprimen carácter, porque la Ruta de la Seda es uno de los mitos viajeros más importantes del mundo y de la historia, la ruta comercial terrestre más larga del mundo, que atraviesa paisajes remotos en el corazón de Asia Central, donde la historia ha sido especialmente convulsa y violenta, con las sucesivas oleadas de guerreros procedentes de las estepas, que eran verdaderamente crueles, como es el caso de Gengis Khan, que pasaba a cuchillo a toda la población de las ciudades que se le resistían.

Enrique Domínguez Uceta

Uzbekistán | 23.06.2024 13:35

Pero una de las cosas que hemos aprendido es que, aunque estuvieran peleando diferentes grupos étnicos por la posesión de las tierras y las ciudades, al parecer nunca molestaban a las caravanas de mercaderes de la Ruta de la Seda, porque eran las que llevaban la riqueza a las ciudades por las que pasaban, pagando impuestos, ocupando los caravanserais y fomentando el comercio. Y ahora pasa algo parecido con los grupos de turistas o viajeros, que son muy bien recibidos en Uzbekistán, un país absolutamente civilizado, seguro y tranquilo, muy hermoso.

Bukhara
Bukhara | Pexels - Axp photography - 500641970-19473666

Las caravanas eran sagradas

Desde Samarcanda, que seguramente es la más famosa de las ciudades de la Ruta de la Seda, el viaje sigue hacia dos ciudades absolutamente imprescindibles como son Bukhara y Khiva, que conservan aún mejor, con mayor densidad, los restos de su pasado medieval y del tiempo de esplendor de la Ruta de la Seda. Es muy curioso que en un país donde la mayor parte del territorio es desierto, el viaje transcurre entre cultivos y un entorno verde, porque las ciudades están junto a los ríos que las une y la carretera sigue el mismo curso, y como va cerca del río riega los campos y se ve la buena agricultura y las casas de los campesinos, acompañando una carretera amena, de esas en las que pasan las cosas, la gente y los taxis esperan en los cruces de carreteras y hay puestos de sandías y melones al borde del camino.

Y por una de esas carreteras se llega a Bukhara que es una de las joyas del viaje porque tiene de todas las maravillas que esperaba encontrar, lo primero es que tiene una gran fortaleza, amurallada y poderosa, para evitar los ataques de los invasores, su nombre es Ark, es impresionante, con sus altos taludes sobre los que se eleva su ondulante muralla a la que se entra por otra rampa. Dentro vivía el emir, el gobernante, con su mezquita, una de las tres que hubo dentro del recinto, con los antiguos establos, la ceca donde se hacía moneda, sus salas de audiencia y una vista dominante sobre la ciudad.

La Ruta de la Seda
La Ruta de la Seda | Pexels - Axp-photography - 500641970-19473596

Aatravesar el desierto y encontrarse con una ciudad tan fortificada, tan inaccesible

Ahora las ciudades han crecido alrededor del recinto amurallado, pero en el Ark de Bukhara se siente el espíritu de aquel tiempo de guerras pero también de esplendor reflejado en las mezquitas y en las madrazas en las que se estudiaba y aprendía el Corán, pero también eran lugares de ciencia y conocimiento. Pero a mi me parece interesantísimo comprobar que, en estas ciudades del desierto, aunque estuvieran cerca de ríos, los ríos podían secarse y las ciudades tenían una gran alberca o gran estanque en el centro, a los pies de una gran mezquita, que aportaba agua cuando cesaba la del río, y es una estructura muy interesante, la ciudad alrededor de la alberca, como las he visto en Yemen y en otros lugares de Oriente Medio. Así es el complejo Labi-Hauz, o el de Bolo-Hauz, al pie de la bellísima Mezquita de las cuarenta columnas de Bukhara.

Uzbekistán
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En Samarcanda están los monumentos desperdigados, pero en Bukhara están próximos

Sobre todo están cerca el conjunto de Poi Kalón, con varios edificios de estos con las fachadas y las cúpulas recubiertas de ladrillos vidriados, de mayólica, que son una belleza y que visten de delicados encajes la tosca masa de ladrillo que soporta los pesos y empujes de las bóvedas. Kalón es el nombre del alto minarete que se ha convertido en símbolo de la ciudad, y que era como un faro que podía guiar a las caravanas que llegaban de oriente y occidente. En Bukhara pude probar también el plato nacional del país, o el plato de lujo que se prepara en las bodas y grandes ocasiones, un guiso a base de carne, verduras y arroz, de exquisita suavidad y de intensos sabores.

Y el aspecto gastronómico del viaje me ha encantado, ya dijimos que este viaje que contamos es un viaje real, que organiza el mayorista Kan.nak y que lo ha hecho genial, con su propio vuelo directo desde Madrid con WorldToFly, a precio muy asequible, y que está bien organizado porque, en Uzbekistán hay un gran contraste entre los monumentos que son de otro tiempo, de etnias guerreras con turbantes y camellos y la realidad del país hoy, que es un país moderno, seguro, pero cuyo pasado de grupos étnicos con sus trajes tradicionales ha pasado a la historia, pero en este viaje son los restaurantes los que dan continuidad al encanto del arte tradicional, restaurantes donde además se come muy bien, pero te mantienen insertado en el encanto oriental de la Ruta de la Seda.

Por cierto, que ahora de cara a julio y agosto, la mayorista Kan.nak suspende los vuelos por el excesivo calor del destino, pero volverán a operar desde el día cuatro de septiembre hasta el treinta de octubre, y el viaje está disponible en agencias de viajes. Hay que aprovechar esa próxima ventana de tiempo agradable, porque en invierno hace mucho frío, y la oportunidad de volar a Uzbekistán sin escalas intermedias.

Khiva
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Khiva es el mejor sitio para sumergirse en el exotismo de la Ruta de la Seda

Realmente es la joya del recorrido, una ciudad rodeada por el desierto de Kyzyl Kum que tiene 2.500 años de antigüedad y que se llenó de monumentos en el siglo XVII, pero que ahora conserva casi íntegra la ciudad antigua con sus murallas, templos y mezquitas dentro de un rectángulo de 600 por 400. En Khiva, todo es como esperábamos al empezar el viaje cuando entramos en esa parte antigua, que se llama Itchan Kala y es como entrar en la ciudad del siglo XVII, XVIII o XIX, como un explorador, porque todo está impecable, como si estuviera intacto, la muralla completa, las cuatro puertas, las calles que las unen, orilladas de mezquitas, palacios con los recintos del harén, mercados y minaretes cubiertos de ladrillos vidriados de colores, patios frescos y callejones estrechos y en sombra y todo está perfecto porque ha sido concienzudamente reconstruido con tanto mimo que ahora es patrimonio de la humanidad.

Un lugar que te permite perderte por sus rincones y evocar lo que era una ciudad de tapial, de adobe y de ladrillo hace siglos en medio del desierto de Asia Central. Con el aliciente de que es una ciudad reconstruida pero donde vive mucha gente, donde los niños corren por las calles, y está todo lleno de tiendas de artesanía y recuerdos, lo que es normal en los mercados orientales. Pero además hay restaurantes en las terrazas de algunas casas para ver la puesta de sol mientras cenas al aire libre, y hay que decir que no es difícil encontrar cerveza o vino en los restaurantes. Hay algunos hoteles que permiten dormir dentro de ese casco antiguo y salir a pasear de noche por las calles entre los monumentos, o madrugar para ver amanecer en la ciudad vacía. Es un lugar también ideal para conocer las viejas historias de un mundo felizmente desaparecido, el lujo de la vida de los emires y la crueldad de sus guerras, la vida en el harén, con esposas principales y concubinas, los permanentes enfrentamientos entre etnias, y el trabajo de los artistas y arquitectos procedentes de Persia.

Ruta de la Seda
Ruta de la Seda | Pexels - Mavluda Tashbaeva - 133603941-10482701

El país tiene una interesantísima historia que cambia con la invasión de la Rusia de los zares, luego con el gobierno de los bolcheviques, que son los que realmente modernizan la sociedad, la sacan de la Edad Media con un régimen tan autoritario como los anteriores, pero incorporan a las mujeres a la vida pública y laboral, dan derechos de vivienda, sanidad y trabajo a todos y luego ya tienen la historia moderna en la que adquieren la independencia después de 1991 y nace un país con un gran equilibrio en la vida cotidiana, de islamismo muy moderado, de gran estabilidad y seguridad en la vida cotidiana, y que se moderniza muy deprisa sin aspavientos, porque no tienen petróleo pero tienen mucho gas, de hecho la mayoría de los vehículos funcionan con gas, tienen metaneras además de gasolineras.