La entrevista ha arrancado comparando la Cataluña real y otra que habla de independencia. Y es que la presidenta tiene “esa sensación. Hay una Cataluña real y una Cataluña oficia. Mientras que el discurso del presidente de la Generalitat alertaba de amenazas en relación a la lengua, la verdadera amenaza en Cataluña son los 600.000 parados, un 45 por 100 de paro juvenil, y que las familias tienen graves dificultades para llegar a final de mes. Esas son las amenazas reales que te traslada la gente cuando hablas con ella en la calle. A veces no se explican las cosas correctamente”.
Sobre la suspensión de actos institucionales en Badalona, “no se suspendió la Diada; se suspendieron dos actos únicamente. El resto se celebró con total normalidad. Se suspendió la ofrenda floral y el discurso del alcalde, ante la negativa y el boicot de todos los grupos municipales, que se negaron a que el alcalde ondeara la bandera española junto con la señera. Eso es lo que ocurrió. En Vic ha ondeado la bandera estelada. El partido de Duran Lleida ha permitido que una bandera ilegal esté ondeando en un ayuntamiento de Cataluña”.
Este posicionamiento radical de CIU no quita que estén haciendo bien otras cosas: “Creo que CiU está haciendo las cosas correctamente en el ámbito económico. Pero creo que en cuanto a la lengua y a los actos de ayer se está utilizando excesivo tactismo. Se está sobreponiendo al interés general el interés partidista y electoral. En cuestiones como la de la lengua, lo que hay que hacer es que acatar una resolución judicial. El PP siempre ha apostado por un modelo trilingüe integrador, en una misma clase, con porcentajes en cada una de las tres lenguas: catalán, castellano e inglés”.
Si ganan las generales, puede que necesiten el apoyo de CIU: “Espero que no sea así, porque en estos momentos tan críticos que estamos viviendo, creo que los españoles necesitan unos políticos que estén a la altura de las circunstancias. Ahora, con una situación tan grave, lo que necesitamos son consensos y que haya transversalidad. Nosotros no hemos hablado de dividir, ni de amenazas o confrontación. Yo he apelado estos días a la serenidad y a la responsabilidad, y eso voy a seguir haciendo”.
Sobre el discurso agraviado de Artur Más, “Yo siempre dije, incluso antes de conseguir el resultado electoral que conseguimos, que Artur Mas y la nueva CiU tenía un claro perfil independentista y que se distanciaba mucho de la CiU más posibilista de Jordi Pujol, aunque ahora él mismo se haya unido a esos planteamientos independentistas. Por eso me negué a la investidura del presidente Mas. Por primera vez, el PP en Cataluña no se abstuvo y votó de manera negativa a la investidura de Artur Mas. Él planteó un modelo de transición de Cataluña hacia la independencia. Su objetivo claro es llevar a Cataluña a la independencia del resto de España. Y quiere que haya un derecho a decidir sin límites, para que se plantee una posible independencia de Cataluña. Esa es la verdadera CiU de hoy. Y veo que el Señor Duran no hace nada para limitar ese posicionamiento independentista. Esa es la situación real”.
