Ahora mismo las aguas del Mediterráneooriental están más calientes que nunca debido a las tensiones geopolíticas que se están dando en las aguas entre Grecia y Turquía, que están a flor de piel y vienen de lejos.
Desde hace un año la situación se ha ido tensando, hasta principios de agosto que la situación ha llegado a otro nivel. Todo tiene que ver con la delimitación de las aguas territoriales de esa zona y con la pelea por los recursos que se pueden encontrar en ellas.
Eduardo Saldaña cuenta que los hidrocarburos del Mediterráneo oriental son "muy jugosos" para muchos países de la región. "Nadie quiere quedarse sin su trozo del pastel", y mucho menos Turquía, que mandó hace 20 días un buque prospector escoltado por su armada a las aguas que tienen en disputa con Grecia.