Esta película de Carlos Sedes pretende transformar la ciudad en el verano de 1958.
En este momento nuestros interlocutores se encuentran en la Casa Petra de la Riva, lugar esencial del rodaje.
Se trata de una película en la que nos encontramos con dos momentos históricos, unos personajes que conocen a otros, una investigación histórica…En definitiva; una historia con muchas historias. “Habla sobre todo de amistad, de introducción a la cultura, a un arte como es el del vino, la música… todo ese convento de cosas hicieron que me enamorara por completo de la historia” confiesa Rey.
“Me apasiona el cine de época, por lo que, para mí, buscar los decorados es el momento más creativo del rodaje”, expresa Ana.
“Creo que nos está quedando una película muy especial la verdad”, declara Javi Rey.