Estos robos tan repetidos en el verano de 2022 están siendo la moda de esta temporada. En Mallorca, el club de la ciudad de Inca encargó la colocación de hierba artificial en el campo del Juventud Sallista. El primer día instalaron la mitad del césped y dejaron un rollo de 40 metros para colocar al día siguiente. Rafel Palou, presidente del club, ha contado que cuando los operarios llegaron para acabar de poner el césped se encontraron con que ya no estaba el rollo de 40 metros. El ayuntamiento de este municipio había subvencionado la puesta a punto de este estadio, que ha costado unos 400.000 euros.
Este no es el único caso, en Mérida, hace unos días robaron 24 metros cuadrados de césped artificial en un parque infantil, lo estaban a punto de inaugurar. El Ayuntamiento ha invertido 116.000 euros en renovar 12 parques infantiles. En Poio, un municipio de Pontevedra, también robaron césped artificial en un parque infantil, pero esta vez el césped no era nuevo, en este caso el césped ya llevaba tiempo colocado.