Mañana tenemos el primero en Lisboa, entre merengues y colchoneros, que se han llevado tras de si a media capital para alegría de los portugueses. Seguro que la final de la Champions será una inyección económica importantísima para Lisboa y alrededores.
El otro derby es en las urnas el domingo entre PP y PSOE, aunque un buen puñado de partidos pequeños lucha hasta el último momento para tener voz y representación en Europa.
Y si me permiten el chascarrillo podríamos encontrar otro nexo entre fútbol y elecciones europeas, aquel adjudicado a Gary Lineker que definía el futbol como el juego de 11 contra 11 y que siempre gana Alemania. En el juego, se acabó su hegemonía. Pero en la política y la economía es verdad hoy y lo será el lunes, gane quién gane. Eso sí, unos se lo pondrán más difícil que otros.