“¿Cuánto dinero podemos sacarle a este cliente?” es la frase más pronunciada por los ejecutivos del banco según cuenta Greg Smith – el disidente-, que añade que para crecer en la entidad financiera hay que cumplir algunos requisitos, sobre todo, el de convencer a los clientes para que inviertan en acciones o productos de los que el Banco se quiere deshacer, y conseguir que compren cualquier producto financiero que interese a Goldman aunque sea poco adecuado para quien lo adquiere.
“Me pone enfermo cómo se habla de timar a los clientes” se lee también en la carta del “arrepentido Smith”, a lo que Goldman Sachs ha respondido con enorme austeridad lingüística que no están de acuerdo con la visión expresada por su exempleado.
Obviamente la carta ha tenido mucho impacto en Internet, cosa curiosa porque lo que dice el antes malvado Greg Smith, es cosa vista y comprobada desde el otro lado de la ventanilla. Los bancos no pasan, en general, por el mejor momento de su reputación, pero en su negocio, eso es indiferente.