Pese a que la Fiscalía no ha apoyado esa petición, la Infanta deberá declarar el próximo día 27 de abril como copropietaria de Aizóon y directiva de Nóos.
La decisión de Castro se produce tras el goteo permanente de correos electrónicos que el exsocio de Urdangarín, Diego Torres, ha ido entregando al juez en una especie de bomba “en diferido”, por explicarlo en terminología Cospedal, que pretendía desde el principio conseguir el paso que hoy ha dado el juez. Escribe Castro en su auto que “Hay que evitar el descrédito de la máxima de que la justicia es igual para todos”.
Esas fueron las palabras del rey, por cierto, en aquel profético mensaje de navidad. Imputados todos los que cobraron, falta ver si también ingresan en esa condición los que malgastaron dinero que no era suyo sino de todos los ciudadanos a los que representaban.
A fin de cuentas si Urdangarín cobró todo ese dinero es porque presidentes de comunidad y alcaldesa estuvieron de acuerdo en pagarlo. Despilfarrar con dinero ajeno merece tanto castigo como cobrarlo sin ninguna justificación.