Casi todas las mayores de 300 mil habitantes se han aplicado con éxito a reducir la cuantiosa deuda con la que han tenido que lidiar. Alicante, Córdoba, Bilbao, Palma de Mallorca, Sevilla, Valencia, Valladolid, Zaragoza, Las Palmas han conseguido reducir el importe de lo que debían en el último año.
De entre todas las grandes ciudades, subrayemos tres por distintos motivos. Barcelona y Murcia son las excepciones a la regla: ambas han aumentado su deuda, aunque en el caso de Barcelona hay que decir a su favor que era la más asumible de entre los grandes municipios. En todo caso, Ada Colau tendrá que aprender a apretarse el cinturón.
La noticia más destacable es el resultado del ayuntamiento de Madrid. Desde que ha llegado Manuela Carmena la deuda de la capital se ha reducido en 2 mil millones de euros. Es verdad que el endeudamiento madrileño era estratosférico (la cifra llego casi a los 8 mil millones en 2012), pero es meritorio que Carmena haya conseguido liderar la bajada de las ciudades en España y que hoy deban los madrileños 2 mil millones menos que cuando llegó.
Son datos de hoy del Banco de España, o sea, es información. Si hay que dar opinión sería que eso tampoco se lo van a perdonar muchos a la señora Carmena.