Este fin de semana, varios barones socialistas han transmitido su protesta por el posible apoyo de Bildu a los Presupuestos Generales del Estado, aunque después de la Ejecutiva de esta mañana y las explicaciones pertinentes, el mensaje que han difundido es que hay cierre de filas en el partido. Bueno, ya veremos.
Este mediodía, el expresidente Zapatero, en cuyo mandato ETA dejó de matar, defendía la necesidad de aprobar los Presupuestos con todos los votos posibles. Insistía en que Bildu debería reconocer el daño causado, cosa que no ha ocurrido.
Un gran debate político, ético, moral. Vamos a debatir sobre este asunto que ha incendiado a la oposición del Partido Popular en tiempo de Gabinete.
¿Hay que pasar página 9 años después del fin del terrorismo y celebrar que hagan política, como decía Zapatero o mientras no pidan perdón hay que vetar a Bildu aunque sean la segunda fuerza de Euskadi? ¿Debe haber líneas rojas para pactar con determinadas fuerzas políticas que tienen representación en el Congreso de los Diputados y que, por tanto, son legales?
En este caso muy concreto es Bildu, pero hemos vivido, si apelamos a la memoria, situaciones de pactos o de acuerdos que han sido muy polémicos porque tenían como protagonistas a los independentistas catalanes o Vox, en el caso del Partido Popular.