@julia_otero
Madrid | 08.12.2016 16:53
España, junto a otros Estados de la Unión (Alemania, Grecia, Lituania, Luxemburgo y Reino Unido) han decidido mirar para otro lado ante el escándalo del fraude de Volkswagen, así de claro. A pesar de que quedó demostrado que Volkswagen manipuló y engañó para disminuir los marcadores de emisiones de óxido de nitrógeno, a pesar de que incumplió la ley y Bruselas ordenó que fuera castigada y multada por ello, España no ha hecho efectivo ni el castigo, ni la multa ni la vigilancia para impedir nuevos engaños.
Bruselas ha abierto jueves procedimiento de infracción a esos países a esos países. El gobierno comunitario está "frustrado por la falta de cooperación de ciertos gobiernos" a los que acusa de toda suerte de subterfugios para proteger a la empresa alemana. Que lo haga la propia Alemania, sin tener disculpa, es más comprensible, pero que lo haga España, Grecia, Lituania o la República Checa, acerca esos países a la condición de lacayos. No hemos descubierto la pólvora, de acuerdo, pero es triste constatarlo.