Hay quien sostiene incluso la teoría de que es una estrategia de Moncloa para dinamitar cualquier posibilidad que no sea volver a las urnas. En caso de tal cosa ocurra faltan tres meses, tiempo suficiente para que el episodio quede amortizado y no tenga castigo en las urnas. Sin embargo, hay elecciones muy pronto en Galicia y en Euskadi, de hecho está a punto de empezar la campaña electoral. El presidente gallego, Núñez Feijóo, se juega mucho el 25 de septiembre y es a él a quién le ha caído Soria en plena campaña. Por eso ha sido el político popular de mayor rango que más claro lo ha dicho esta mañana: el nombramiento de Soria es muy arriesgado porque no es fácil de entender ni de explicar.