Mientras llega esa fecha, el juez Ruz exige información sobre planes de prejubilaciones, pensiones, seguros de vida y jubilación….indemnizaciones, es decir, explicación de todas las cifras destinadas a pagar una competencia profesional de la que, visto lo ocurrido, carecían por completo.
En paralelo, también la fiscalía de Barcelona ha abierto investigación sobre las retribuciones de los altos cargos de Cataluña Caixa.
Entre lo uno y lo otro, hoy podemos abrigar cierta esperanza de que tal vez, solo tal vez, la impunidad se haya acabado. Igual España no es tan diferente a otros países serios, donde el que comete un delito económico, lo paga por muy amigo o protegido que sea del poder político.