Julián Casanova afirma que "tenemos un concordato del año 53 que la democracia no ha sido capaz de revisar y es un anacronismo", mientras que María José Tarancón asegura que "si ahora mismo la Iglesia dijera os quedáis con todo, el Estado no podría mantener lo que mantiene la Iglesia".
Por su parte, Ana Pardo de Vera sostiene que "la Iglesia católica no asume la igualdad, ni el matrimonio gay, ni el aborto. Interviene constantemente en la sociedad".