"Era probable que ganara el partido ecologista, porque los partidos centrales han perdido popularidad", señala Juan. Además, cree que "el voto extranjero ha sido decisivo porque es mucho más tolerante y más en línea con el pensamiento ortodoxo".
"Austria está partida en dos y hay que tener en cuenta que también Francia tiene una extrema derecha que puede ganar en las próximas elecciones", explica Alejo. Esta división además "puede tener consecuencias nefastas en una sociedad democrática, y hay tres factores que han motivado la extrema derecha: la crisis, la corrupción y los refugiados".
Elisa enumera los países en los que la ultraderecha "tiene más del 20% de los sufragios como Polonia, Hungría, en Bélgica y Austria". En España sin embargo, "el recuerdo de lo que defienden estos partidos, está todavía muy reciente por el franquismo".