"El postureo de los líderes políticoses casi una carcajada en la cara de los ciudadanos, ya que tienen que decir un mensaje auténtico", explica Elisa, ya que considera que la existencia de un postureo relacionado con el marketing político en el que "se venden cosas que no son reales".
Lucía cuenta algunos casos concretos de postureo y que además lo han admitido los políticos, como por ejemplo cuando Íñigo Errejón salió de las conversaciones para las negociaciones, y decía que se había "postureado". Además explica que la sociedad de consumo "es la que está desarrollando el postureo".
Por otro lado, Juan Carlos explica que el postureo en la política se produce cuando un representante de un partido "utiliza un adjetivo que no quería usar y lo cambia por un sinónimo, y esto puede parecer que posturea".