El Gabinete ha centrado el foco en Britney Spears. La artista que tiene una fortuna estimada de 60 millones de dólares, testificó ayer en un Tribunal de los Ángeles para pedir el fin de su tutela legal que definió como “abusiva”. Su padre, quien gestiona sus bienes, asegura que no está en plenas capacidades mentales.
“Quiero que me devuelvan mi vida. Han sido trece años y ya basta”, denunciaba Spears, junto con otros hechos como que a veces le suministran drogas para que trabaje o que le obligan a llevar un DIU para que no pueda tener hijos con su actual pareja con la que también tiene prohibido casarse. La joven de 39 años relató que su tutela se ha convertido en un secuestro del que se beneficia su familia y un grupo de abogados que llevan años recibiendo el dinero que ella gana con sus trabajos.
El debate se ha abierto con dos posturas señaladas: mientras que Javier Gallego y Arantxa Tirado se posicionan a su favor alegando que como adulta tiene derecho a que esa sentencia se vaya revisando ya que "su enfermedad no ha impedido que ella haya protagonizado en los últimos años varias giras mundiales", Elisa Beni ha defendido el trabajo de su tutor reconociendo que su trabajo es "difícil y complicado".
Una tertulia ardua e intensa que ha concluido con la reflexión de Beni de que en España las incapacitaciones "muchas veces llegan tarde" y ese es el problema principal en nuestro país. A su vez, Javier que asegura que "hay que abrir los ojos ante casos donde hay familiares cuya intención no es buena".