El debate sobre el tiempo y la racionalización de los horarios está presente en nuestra sociedad desde hace dos décadas. En España, en mayo de 2003, se constituyó la ARHOE-Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles, de la que han llegado a formar parte más de 100 organismos.
ARHOE pidió que los horarios de España se adapten a los de Europa. Por ello, publicó un manifiesto en el que reivindicaba el tiempo como un bien único e insustituible en el que todos debemos pensar y debemos dar el máximo valor. Sin embargo, en la práctica, ha habido poco avance.
España sigue siendo, como recordaba el pasado junio, David Jiménez, en una columna en el diario, New York Times, "un país de disparatados horarios" y subrayaba que estamos entre los europeos que más tarde salimos de la oficina, los que tenemos el prime time televisivo más tardío, los que más insatisfechos estamos con el tiempo que pasamos con nuestros hijos, los que empezamos a cenar dos horas después que el resto del mundo…
Marta Junqué, la co-coordinadora de "Barcelona Time Use Initiative for a Healthy Society", nos ha informado de que va a salir el primer documento a nivel mundial que defiende que el derecho al tiempo debe ser un derecho ciudadano en aras de la productividad y de la salud y que se debe proteger por parte de la administración y de las empresas. Además, ha destacado que los más afectados por el uso inadecuado del tiempo son las mujeres y las personas con pocos recursos.
Y es que, en este asunto, también hay brecha de género. Así lo corroboran los datos de la Unión Europea. Según Eurostat, en España, las mujeres dedican cuatro horas y media al cuidado familiar y de la casa frente a las dos horas y media que emplean los hombres.
El cambio de hora
En 2018, la Comisión Europea, planteó acabar con el cambio de hora y dejar el mismo horario todo el año, algo en lo que están de acuerdo empresarios, sindicatos y los ciudadanos. En nuestro caso, el 62,5% de los españoles apoyarían que dejemos de adelantar y atrasar el reloj.
A su vez, los expertos defienden que en España deberíamos tener el uso horario que tenemos en invierno y aseguran que el cambio de horario tiene consecuencias.