Esta misma mañana Irene Montero, ministra de Igualdad hacía público el plan de 20.000 millones para un Plan Estratégico de Igualdad que recoja medidas contra los que ha llamado "suelos pegajosos", las mujeres en el ámbito rural, migrantes, jóvenes, con discapacidad, LGTBI y familias monomarentales. Esta anuncio ha causado una gran controversia, especialmente por parte de los miembros de algunos partidos de la oposición como Vox o el PP.
Y todo en en 'Día Internacional de la Mujer', una jornada que con cada año que pasa alcanza una relevancia mayor en el marco social. Ángela Rodríguez, secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género ha señalado que "el feminismo es algo que ya está pasando, y aunque no lo nombremos como tal, tienen efectos cotidianos que son positivos y que ya está disfrutando mucha gente".
Las discrepancias internas del movimiento feminista
Este año por primera vez, en muchas ciudades de España se han dos manifestaciones distintas que transitarán las calles de forma independiente por falta de consenso en el seno del movimiento relacionado con discrepancias con la situación de las personas trans o de la abolición de la prostitución. Sobre este hecho, Rodríguez ha señalado que "el debate es necesario" y reconoce que "todas las manifestaciones, por muy pequeñas que sean, son válidas y por eso hay que respetarlas".
El movimiento también ha manifestado su postura a modo de oposición a la guerra de Ucrania y al envío de armas, lo que, según Julia Otero "corre el riesgo de que margine la causa que le da sentido, que son los derechos de las mujeres". Para Ángela Martínez "las mujeres somos las que más sufrimos las consecuencias de los conflictos armados, y de ahí que también hagamos un grito por la paz y oposición a la violencia, que en realidad es lo que siempre hemos reclamado".
