Ya conocemos el caso de una trabajadora de Las Palmas de Gran Canariaque fue despedida, tras 13 años desarrollando labores administrativas, para ser suplida por un programa informático o bot de gestión.
Según el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, el Juzgado de lo Social número 10 ha rechazado que el despido de la demandante estuviera justificado por "causas objetivas" alegadas por la empresa Lopesan Hotel Management S.L.
Javier Ercilla, juez experto en Inteligencia Artificial, es el que declaró el despido improcedente. “Si interpretamos conforme a la luz de nuestros tiempos, la automatización creciente que se está produciendo en todos los ámbitos laborales determinaría la destrucción de empleos de entre un 35 y un 40%… No podemos calificar de despido objetivo algo que va a ocurrirle a 3 de cada 10 trabajadores”, declara el juez.
En su sentencia, el juez Ercilla diferencia este caso de otros anteriores en los que los instrumentos de producción han quedado obsoletos: “Lo que considera la sentencia es que aquí no se ha producido una devolución o cambio en el instrumento de producción como sí se produjo con las cámaras analógicas o digitales, sino lo que sucede es que un trabajo que hace un humano pasa a ser sustituido por un robot. Si consideramos desde el punto de vista literal que eso es un cambio en el instrumento sería considerar que un trabajador es un instrumento y no considero que eso sea así”, asegura.
Concha Monje, investigadora de Inteligencia Artificial considera que “se ha hecho justicia”,pero se plantea ante el reto tecnológico que se nos viene encima cómo esta ley debe adaptarse de manera que no solo ampare el derecho del trabajador sino que tampoco frene la evolución tecnológica “a la que muchas empresas tendrán que acogerse si quieren ser competitivas”.
Nos planteamos qué va a suceder con el Estado Social y todos aquellos cotizantes que se pierden por cada 3 o 4 trabajos que son sustituidos por un solo robot…
Por su parte, el juez plantea la posibilidad de cotización o de tributación por parte de los robots inteligentes en virtud de cuantos trabajos se hayan sustituido.