Le recordamos que se ha reducido la deuda económica de la capital de Aragón en 97 millones de euros y contesta que lo ha conseguido, entre otras medidas, "actualizando contratos, que se estaban prorrogando y que generaban intereses de demora del 8%", aunque confiesa que "nos ha sorprendido porque no veníamos aprendidos y éramos inexpertos. Solo trabajando y dejándonos la piel estando encima de los asuntos".
Sostiene que si del algo se arrepiente es de "haber recortado asesores", ya que "fue una melonada y la estamos pagando, porque los necesitamos" y argumenta que "limitar los sueldos se trata de tener un sueldo digno que dé para vivir y no te aleje de la ciudadanía".
Asegura el alcalde de Zaragoza que "estamos intentando pacificar un poco las relaciones entre el gobierno de Aragón y el Ayuntamiento" y "hemos movido del sillón a una serie de personas que han hecho de la representación política su profesión", acaba exponiendo.
Por su parte, Muñoz habla sobre las medidas que han impuesto para rebajar los pagos en electricidad y desvela que "es verdad que nos hemos atrevido a decirle a las eléctricas que están sangrando todos los días" y agrega que "llevamos ahorrados tres millones de euros desde que amenazamos con acudir desde el Ayuntamiento y romper el monopolio de las eléctricas para ir al mercado directamente".