En plena celebración del Foro de Davos, que reúne en Suiza a algunos de los economistas y expertos en fianzas más importantes del mundo, Gonzalo Bernardos y Javier Díaz-Giménez regresan a 'Julia en la Onda" para analizar los sucesos económicos de mayor relevancia esta semana. El Foro económico que está teniendo lugar en el país helvético tiene como lema "recuperar la confianza", puesto que muchos expertos pronostican un retroceso de la economía mundial en los próximos años.
¿Regresa el proteccionismo económico?
En el centro de la discusión económica se encuentra la noción del proteccionismo que, en opinión tanto de Bernardos como de Díaz- Giménez, está volviendo a ser impulsado por los países más poderosos. Sin embargo, los economistas poseen posiciones contrarias en torno a este debate.
Bernardos, profesor de Economía de la Universidad de Barcelona, celebra que "afortunadamente" esté acabando la era de la globalización económica, y afirma que impulsando medias de libre mercado "Europa ha hecho absolutamente el primo". El economista lamenta que los estados europeos no hayan apoyado financieramente a las empresas privadas, y pone como ejemplo a China, que basa su economía en un constante apoyo estatal a las empresas estratégicas.
Para reforzar su postura, Bernardos pone como ejemplo a Alemania, que durante décadas fue país líder en la exportación de vehículos de alta gama: sin embargo, el coche más vendido en España en los últimos meses es un MG chino, cuya fabricación ha sido apoyada por el estado chino. El economista afirma que las políticas de austeridad y contención económica germana han provocado que Alemania esté "destrozada", y replanteándose que acabar con el estricto limite de décifit público que tienen impuesto constitucionalmente. Por el contrario, Bernardos aplaude las políticas de Biden, elogiando sus políticas destinadas a evitar que las empresas americanas produzcan en China, practicando lo que el economista considera "dumping fiscal".
Díaz-Giménez, sin embargo, lamenta que la tendencia de los estados a intervenir en la economía esté aumentando: "Cualquier empresa que no sea capaz de pasar la prueba del mercado no merece estar abierta, merece estar hundida", opina el economista, que hace referencia a las teorías del economista David Ricardo para defender que "sin ningún lugar a dudas siempre compensa el libre comercio".
Díaz-Giménez entiende que una mayor eficiencia y productividad de China solo perjudica a las empresas que no son competitivas, y que beneficia a los consumidores y a la economía. El economista ha criticado la decisión del estado alemán de subvencionar con 9000 millones a una importante fábrica de baterías para evitar que se marche a Estados Unidos. Para el economista, los dirigentes de Alemania han decidido en nombre de los ciudadanos "que 1.000 millones de su recaudación van a ir a subvencionar una empresa que es incapaz de competir en los mercados globales".
La polémica entre Gotham y Grifols
En la sección de hoy, los economistas han comentado también el enfrentamiento entre la consultora Gotham City Research y la farmacéutica española Grifols, que tras un informe negativo de la empresa estadounidense ha visto caer su valor en bolsa casi un 40%. Bernardos considera que en Gotham han actuado en beneficio propio emitiendo un informe que advertía de que el valor económico de Grifols era cercano a 0, sin ser esto cierto, según opina el economista
Bernardos considera que esta maniobra ha generado un pánico financiero que ha hecho caer las acciones de Grifols; de esta caída se ha visto beneficiada económicamente otra división de Gotham, que habría apostado en los mercados financieros por la caída de la empresa.
David Díaz-Giménez, sin embargo, afirma que Gotham ha hecho "un servicio público" al advertir de algunas irregularidades en las cuentas de la farmacéutica: Díaz Giménez afirma que ni Gotham ni ninguna otra entidad puede provocar esa pérdida de confianza si no hay indicios de irregularidades, y el propio profesor señala que Grifols ha enredado sus cuentas con el patrimonio de los accionistas principales, la familia Grifols. El economista quita importancia a la intervención de Gotham, afirmando que la emisión de estos informes "es parte de la bolsa, es parte de la vida, de las apuestas, de tomar riesgos". "Tú puedes hacer caso a Gotham, o no hacer caso a Gotham", opina Giménez, que afirma que "al final todo está en Grifols".
El desafío de la inteligencia artificial en el mundo del trabajo
Por último, los economistas han comentado en el programa el último pronóstico lanzado por el Fondo Monetario Internacional, que advierte de que el 60% de los empleos en el futuro se van a ver afectados por la irrupción de la inteligencia artificial. Ambos economistas, sin embargo, consideran que este avance tecnológico es una oportunidad para vivir mejor, y que el reto reside en la distribución de la productividad de las inteligencias artificiales.
"Al progreso no le tengan miedo, siempre y cuando voten bien y voten a alguien que reparta la riqueza, no que la acumule en pocas manos", ha declarado Bernardos, que afirma que el aumento de la productividad gracias al auge de estas máquinas nos permitirán trabajar menos horas. "Lo que va a hacer la inteligencia artificial es devolvernos al paraíso", considera Giménez, que pronostica un aumento de la productividad que cambiará totalmente el modelo productivo.
El economista afirma que se puede desarrollar un crecimiento repartido, puesto que todo el mundo podrá tener acceso a los algoritmos: "Los algoritmos son ideas. Las ideas se pueden copiar y replica todas las veces que tú quieras, y no cuesta nada", explica el economista.
Ambos expertos están satisfechos con el debate que se ha iniciado en la Unión Europea, que ya está trabajando en "pensar como vamos a repartir la productividad de las máquinas y los algoritmos": en definitiva, opinan que la inteligencia artificial va a traer un crecimiento generalizado, si bien habrá que trabajar para que ese crecimiento beneficie a todo el mundo, incluso a las personas que pueden perder sus empleos actuales por la llegada de esta tecnología. "El crecimiento tiene que ser inclusivo, y no tenemos que dejar a nadie atrás", opina Díaz-Giménez.