Historias como la que nos trae Gonzo hoy son en las que el periodismo es útil de una manera especial.
Fausto Canales tenía dos años cuando entraron unos falangistas armados a su casa, esto fue el 30 de agosto del 1936, su padre nunca volvió.
Lo que la familia no sabía era que esa misma noche fue fusilado junto a seis personas más y después los enterraron a todos en una fosa común.
"En el año 2000 empecé a recuperar esta historia y a investigar", nos cuenta Fausto.
Gonzo estaba haciendo un reportaje sobre los restos del Valle de los Caídos cuando se encontraba en una fotografía una caja, la 198, el apellido de Fausto, al cual conocía de una entrevista anterior.
"Agradezco que me regale la famosa fotografía", dice Fausto que asegura que "en esa caja 198 están los restos de mi padre".
Fausto aun sigue luchando porque exhumen los restos y se lo entreguen a la familia.