La publicidad es uno de los elementos televisivos más importantes, además de la principal fuente de financiación de la mayoría de los grandes grupos mediáticos.
En 'Historias de la tele' con Borja Terán, recordamos algunos de los anuncios más míticos de la historia de la televisión que con el paso del tiempo se han convertido en toda una seña de identidad de sus empresas.
Uno de los mejores ejemplos es el anuncio del 'Coñac Soberano' que describía a la perfección cuál es el perfil de un maltratador y cómo consigue reorientar la culpabilidad hacia la víctima. Sin embargo, este no fue el único anuncio que la compañía creó orientado a la masculinidad y a la descripción del hombre perfecto.
Y es que no es extraño que las grandes empresas se apoderen de causas relacionadas con la diversidad, el feminismo, la lucha contra la homofobia, etc. En ocasiones lo hacen sin darle voz a las mujeres, como en un famoso anuncio en el que se describía en qué consisten las labores que realiza una ama de casa en voz de un hombre, algo que, según Terán "se sigue haciendo mucho a día de hoy".
En la línea de anuncios que muestran "hombres sentados mientras les hacen la comida" encontramos un anuncio en el que se retrata a una mujer que es válida únicamente para servir a su marido.