A partir del 23 de noviembre entrará en vigor la medida que exige a los viajeros que quieran entrar en España presentar una PCR negativa, realizada en las 72 horas previas al viaje.
Ocho meses después del inicio de la pandemia, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunció que esta nueva medida responde a una estrategia conjunta a nivel europeo que, además, "refuerza el carácter de destino seguro de nuestro país".
Pero, recordemos, aquellos días en los que la portavoz del Gobierno descartaba la idea de realizar pruebas PCR que proponían desde la oposición y aseguró que "flaco favor hacen al sector turístico y a nuestra economía".
En la misma línea de la oposición, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, denunció que "el aeropuerto Madrid-Barajas ha sido un foco por el que el virus comenzó", por lo que pidió que se realizaran estas pruebas, aunque no hay datos que demuestren esas afirmaciones.
También, Fernando Simón opinaba que era "inviable" solicitar PCR a los viajeros por los recursos que requería y "porque no garantiza en absoluto que uno o dos días después vaya a haber casos".